El otro día mientras preparaba el desayuno, mi voz interior empezó a torturarme por mi falta de disciplina. Me decía que soy muy desorganizada y que no consigo ser constante en mis proyectos. Me preguntaba, con ganas de herir, si estaba lista para desperdiciar otro día de mi vida.
Y yo, por una vez, en lugar de permitir que me humillara como suelo hacer, decidí contestarle y atreverme a llevarle la contraria. Le dije que no estaba de acuerdo con ella. Que no tenía razón y que yo no soy indisciplinada ni irresponsable.
De hecho, he cargado con un exceso de responsabilidad desde mi más tierna infancia. En el cole nunca me olvidaba de hacer los deberes. Jamás. Es lo primero que hacía al llegar a casa. Los deberes antes que nada y, cuando estuviera todo listo e impecable, ya me permitía jugar o salir con mis amigas.
De mayor, más de lo mismo. No recuerdo haber entregado nunca nada tarde en el trabajo. Soy de las que cuando tiene una tarea con fecha de entrega, lo suele tener listo uno o dos días antes.
Sin embargo, tengo que reconocer que toda esta disciplina con lo que me pedían los demás nunca la he logrado a la hora de llevar a cabo mis proyectos personales. Ahí sí que he sido tremendamente desorganizada. En este sentido, tengo que reconocer que mi voz interior lleva un poquito de razón.
He hecho muchas cosas para satisfacer mi curiosidad y mis inquietudes. Pero lo he hecho de forma poco constante. Por ejemplo, lo de publicar en mi blog de viajes es algo que dejaba totalmente en manos de la inspiración. Cuando ella aparecía, yo escribía. Pero nunca me establecí objetivos o probé técnicas para ser más productiva. Por eso, podía llevarme meses y meses sin escribir nada nuevo.
Ahora, en Palabra de Ana estoy probando algo diferente. Estoy tratando de llevar todo el caos de ideas que rondan mi cabeza a un plan de contenidos de verdad. Tengo el compromiso conmigo misma de publicar varias veces a la semana y de escribir un ratito cada día, me apetezca o no.
En este artículo voy a compartir algunos consejos para ser más productiva que yo misma estoy implementando para sacar este proyecto adelante. Espero que te sirva de ayuda para que tú también puedas adquirir de una vez por todas un compromiso contigo misma y tus proyectos personales.
Cómo ser más productiva y tener disciplina contigo misma y tus objetivos
1. Establece objetivos SMART
Creo firmemente que puedes conseguir (casi) cualquier cosa que te propongas, pero primero tendrás que decidir de qué se trata. Para ello, te recomiendo que te propongas objetivos SMART. Es decir, que sean específicos, medibles, realistas y dentro de un plazo concreto.
Primero ten una visión de hacia dónde te diriges. Luego crea un plan de acción para conseguir esas metas.
2. Crea un plan de acción
¿Qué acciones necesitarás para conseguir estos objetivos? Crear un plan de acción trimestral, mensual y semanal. Luego traduce todos esos objetivos en acciones más pequeñas que sean realistas y te acerquen a tus metas.
3. Crea una lista de tareas semanal
Para ser más productiva y encontrar tu foco, escribe una lista de tareas semanal donde incluyas todo lo que quieres conseguir esa semana. Luego establece jerarquías con lo que tiene que salir sí o sí o lo que puede esperar a la siguiente.
4. Ten una buena agenda a mano
¿Sabías que todo lo que escribes en una agenda tiene muchas más posibilidades de que realmente se lleve a cabo? Esto está demostrado y a mí me funciona. Cuando escribo una tarea en mi agenda, adquiero un compromiso con esa hoja de papel y hago todo lo posible para no decepcionarla. Mientras que, si lo tengo solo en mi cabeza, puede que suceda o puede que no. Por eso, para ser más productiva y tener más disciplina, yo recomiendo escribir todas tus tareas pendientes en tu agenda. De lo profesional a lo personal, incluyendo tareas menos importantes como recargar el móvil o ir al banco.
Con respecto a agendas, puedes utilizar la que mejor te funcione. A algunas personas les gusta utilizar aplicaciones como Google Calendar o Trello. Y otras prefieren agendas de toda la vida. Yo soy de las segundas y prefiero mi agenda física. Ahora mismo uso la de Charuca y estoy encantada con ella.
5. Focus, darling
Hablando de Charuca, le tomo prestada su famosa frase “focus, darling”. Para ser más productiva, asigna un horario en tu agenda para cada tarea y durante ese tiempo apaga todas las distracciones. Esto quiere decir poner el móvil en modo avión o incluso dejarlo en otra habitación. Cierra también el email, las ventanas del navegador que no sean relevantes y cualquier otra cosa que te pueda distraer. Ahora, concéntrate en tu tarea con la máxima atención y dedicación.
No intentes hacer más de una cosa a la vez. El «multitasking» es tu enemigo.
6. Haz descansos para ser más productiva
Cada 50 minutos, intenta parar y descansar 10. Y con descansar no me refiero a buscar tu móvil y perder el tiempo en Instagram. Descansa de verdad. Haz estiramientos, tómate un café, muévete un poco… Descansar cada cierto tiempo aumenta tu productividad en vez de reducirla.
Por cierto, está demostrado que echarse una siesta de unos 20 minutos después de comer también tiene múltiples beneficios como estimular la creatividad y aumentar la concentración. ¡Viva el deporte nacional!
7. Organiza tu contenido
Si quieres sacar adelante un negocio digital, el contenido es imprescindible. Esto te ayudará a ganar autoridad y conectar con tu comunidad aportando contenido de valor gratuito. Además, Google te amará y te podrán encontrar más clientes.
Para saber qué publicar y cuándo, te recomiendo que crees un calendario editorial tanto para tu blog como para las redes sociales. Te recomiendo que sea un calendario realista para no agobiarte. No hace falta que publiques todos los días, pero sí que seas consistente.
Para mí, algo realista ahora mismo es escribir un post en el blog y 3 publicaciones en Instagram a la semana. Esto teniendo en cuenta que no me dedico a Palabra de Ana a tiempo completo y que tengo otros trabajos. Si tú puedes publicar más a menudo, hazlo. Pero como consejo personal, te diría que te centres más en la calidad que en la cantidad, sin descuidar la regularidad. Los algoritmos de Google e Instagram te premiarán si eres consistente.
A la hora de crear tu calendario para redes sociales, no te olvides de tener en cuenta las fechas importantes (como el Día de la Mujer, el inicio de la primavera, la Navidad, etc.). Estas son publicaciones que no tendrás que pensar mucho, ya que puedes hablar solamente del día en cuestión y de lo que significa para ti.
8. Establece bloques de contenido
A la hora de crear tu calendario editorial, establece de 3 a 5 categorías por las que quieres que se conozca tu marca. Estos serán grandes temas alrededor de los cuales puedes crear contenido. Por ejemplo, Palabra de Ana va sobre copywriting, Instagram, branding, consejos de emprendimiento y desarrollo personal. Esos son los grandes temas sobre los que voy a publicar y que he tenido en cuenta para crear mi calendario editorial.
Tener varias categorías de contenido es útil para conectar con más personas. Por ejemplo, es posible que el copywriting no le interese a todo el mundo, pero hay personas que conectan más con el contenido que creo para Instagram o los tutoriales para usar Canva.
Dale a tu comunidad razones para que te sigan regalando contenido que sea muy bueno y útil.
9. Hazle caso a tu inspiración cuando ella decida visitarte
Ten siempre una hoja a mano para apuntar ideas cuando la inspiración aparezca. Porque, reconozcámoslo, la inspiración es puñetera. A mí me suele visitar cuando me ducho, paseo, o incluso cuando me despierto a media noche con insomnio. Entonces empiezan a bombardearme grandes ideas. A veces he tenido que levantarme a las tantas de la mañana para apuntarlas antes de que se vayan con su música a otra parte y yo vuelva a quedarme frita. Con esto quiero decir que, muchas veces, las mejores ideas aparecen en el momento más inoportuno. Lleva siempre una libreta a mano para anotar ideas o escríbelas en Evernote, Google Keep o en cualquier otra aplicación del móvil.
10. Pero, si la inspiración no te visita, no te quedes de brazos cruzados
Esperar a que te llegue la inspiración no es la forma más eficiente de crear contenido. Todas tenemos días en los que nos sentimos bloqueadas o poco inspiradas. Para esos días, busca ideas en Pinterest, Answer the Public o redes sociales. Conviértete en una cazadora de ideas y sigue adelante con tu proyecto.
11. Recicla contenidos
¿Sabías que solo un 6 % de tu audiencia consume tu contenido? Lo sé, esta cifra duele cuando dedicamos tanto tiempo y cariño a crearlo. Por eso, para ser más productiva y que todo ese valor no se vaya a ninguna parte, lo mejor es reciclarlo.
Por ejemplo, de un post del blog puedes sacar varias publicaciones para Instagram. También puedes hacer varios pines para Pinterest, que ayudará a traer tráfico a tu web.
De vez en cuando, actualiza artículos antiguos añadiendo nueva información y vuelve a promocionarlo. Vivimos en una época en la que estamos inundados de información y es normal que haya gente que se pierda tu contenido aunque les interese. ¡Vuelve a ponérselo en bandeja!
Espero que te sea útil este artículo si tú también quieres ser más productiva y sacar adelante tus proyectos personales. Cuando tu voz interior te sugiera que no puedes sacar adelante tus proyectos, demuéstrale con hechos que está muy equivocada.
El éxito depende mucho más de la constancia que del talento. Depende de dar un pasito cada día. Sin prisas, pero con determinación. De creer en ti y que lo que te quema por dentro realmente es posible.
Ten compromiso contigo y los resultados no tendrán más remedio que llegar tarde o temprano.
Un abrazo,
Ana